Este libro ha sido escrito para que no se vayan. En estas páginas se unen el pasado y el presente. Renacen los muertos, los anónimos tienen nombre: los hombres que alzaron los palacios y los templos de sus amos;
las mujeres, ignoradas por quienes ignoran lo que temen; el sur y el oriente del mundo, despreciados por quienes desprecian lo que ignoran; los muchos mundos que el mundo contiene y esconde; los pensadores y sentidores;
los curiosos, condenados por preguntar, y los rebeldes y los perdedores y los locos lindo que han sido y son la sal de la tierra.
Los espejos están llenos de gente. Los invisibles nos ven. Los olvidados nos recuerdan. Cuando nos vemos, los vemos. Cuando nos vamos, ¿se van?