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TEMAS:
1. Paduana 03:05
2. Serenade – Adagio rubato 01:03
3. Serenade – Un poco allegretto 00:59
4. Serenade – Pastorale 00:42
5. Serenade – Andante con moto rubato 00:41
6. Serenade – Vivace 00:40
7. Serenade – Tango 01:08
8. Serenade – Allegro marziale 00:48
9. Serenade – Allegretto 00:41
10. Serenade – Menuett 01:14
11. Per Slava 06:33
12. Sonata for Solo Cello I – Dialogo 04:20
13. Sonata for Solo Cello II – Capriccio 04:28
14. Les mots sont allés 03:19
15. Sonata for Cello, Op 25 No. 3 – I. Lebhaft, Sehr Markiert 01:46
16. Sonata for Cello, Op 25 No. 3 – II. Mäßig Schnell, Gemächlich 01:24
17. Sonata for Cello, Op 25 No. 3 – III. Langsam 04:04
18. Sonata for Cello, Op 25 No. 3 – IV. Lebhafte Viertel 00:47
19. Sonata for Cello, Op 25 No. 3 – V. Mäßig Schnell 01:52
20. Litanie pour Fernando Pessoa 06:12
DESCRIPCIÓN
"A principios de 2020, una idea loca se me ocurrió – un viejo anhelo, una obsesión algo borrosa, un sueño a mi alcance, pero nunca cumplido: para emprender un largo y hermoso viaje. Durante mucho tiempo había estado contemplando un puente entre dos mundos: la música que hago, la improvisación; ese llamado jazz europeo – y música clásica del siglo XX. Algunos grandes ancianos y amigos habían allanado el camino, así que, con mi violonchelo y algunos arcos, me dispuse a cruzar ese puente. Pero inmediatamente me topé con una montaña aparentemente imposible de escalar: ¡Penderecki! Pensé en caminar hacia atrás o esquivar el obstáculo. ¡De ninguna manera! En casa, en hoteles, detrás del escenario e incluso en aviones, persistí, tomándome mi dulce tiempo y eventualmente; Una vez que llegué a la cima, vi a lo lejos bosques encantadores, oscuros y profundos: Ligeti. Me apresuré de cabeza, rascándome la cara y las manos en las zarzas, buscando una manera segura. Luego me encontré con algunos claros, sublimes, cargados de miniaturas de Hanz Werner Henze. Mi implacabilidad y perfeccionismo comenzaron a dar sus frutos: finalmente encontré placer que recibí como estímulo.
En marzo, cuando comenzó el bloqueo, el tiempo se detuvo y de repente tuve todo el tiempo del mundo. Todas las mañanas, en las primeras horas, me iba. Decidí comenzar a grabar. Hindemith y su sonata de cinco movimientos me emocionaron y desafiaron. Mi amigo Dominique Pifarely compartió conmigo una Litanie profunda y orgánica. Descubrí la Paduana de Honegger, una pieza elegantemente cincelada pero olvidada hace mucho tiempo.
Cuando finalmente se levantó el bloqueo, y con Berio, « Las palabras desaparecieron ». Hoy, mi stand desaparece bajo la música de compositores fascinantes que anhelo tocar música – que sé que nutrirá la mía. Al final, descubrí un mundo entero, un nuevo lugar que amo profundamente, al otro lado del puente, espero que no esté cerca de cruzar." (Vincent Courtois)
